El ex mandatario, exiliado en Sudáfrica, luego de ser derrocado por un golpe de Estado auspiciado por Estados Unidos, dijo que, junto con su esposa, "están intimamente convencidos que deberíamos estar allá".
"Estamos dispuestos a volver hoy, mañana, en cualquier momento, para estar junto al pueblo de Haití, compartir su sufrimiento y ayudar a reconstruir el país", declaró Aristide a la prensa en Johannesburgo.
Agradeció el gesto de los "amigos del mundo" en respuesta a las demandas de ayuda de la población de ese país caribeño.
Agregó que su regreso podría ser en uno de los aviones que llegan a Puerto Príncipe con insumos.
"Amigos del mundo entero confirmaron su voluntad de organizar el envío de un avión que lleve equipo médico, material de urgencia y a nosotros", dijo.
Un poderoso terremoto, de magnitud 7, devastó el martes la capital de Haití , situada a unos 15 kilómetros del epicentro.
La Cruz Roja de ese país calcula que el número de víctimas ronda los 45 mil o 50 mil y tres millones de afectados.
Las calles de Puerto Príncipe están llenas de ciudadanos que piden ayuda humanitaria y reclaman que lo enviado por los países no está llegando a las zonas más pobres.
TeleSUR comprobó que los habitantes de las barriadas no han recibido ningún tipo de insumos ni servicio por parte de los encargados de organizar la logística.
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